Las burgers gourmet veganas que revolucionaron el barcelonés barrio del Poblenou, ahora están disponibles en el corazón de la ciudad (Diputació, 200) gracias a la apertura de un segundo local de Vrutal, donde la carta es prácticamente idéntica a la del primero.
El nuevo Vrutal –con el chef Lorenzo Scurci en los fogones– sigue fiel a la esencia vegana que es bandera del grupo de restauración Beleavers, responsables de proyectos gastronómicos disruptivos e innovadores como Desoriente (fusión asiática vegana), Blu (tapas veganas), o el novísimo 26 kg (pasta artesanal vegana).
Si algo define Vrutal, así como todos los restaurantes del grupo, son dos atributos que, de primeras, no se asociarían con un recetario vegano: suculencia y contundencia. Como explica Alessandra Pasutto, co-creadora del concepto, “Vrutal es el único restaurante donde no pensarás si las burgers son de origen animal, vegetal o cósmico, son buenas y punto“.
Las raciones, generosas y contundentes, contribuyen a borrar todo estereotipo que muestra la gastronomía vegana como insulsa y poco saciante. De hecho, desde finales de 2024, Vrutal puede enorgullecerse de ser el sexto mejor restaurante vegano a nivel mundial según TripAdvisor.
El foco de la suculencia y la contundencia viene de la mano de tres valores fundamentales en todos los proyectos Beleavers: gastronomía plant-based, artesanal y saludable, sin buscar aleccionar ni hacer bandera de las ventajas que esta dieta supone para el medioambiente y la salud.
Las reinas de la carta
Las hamburguesas gourmet de Vrutal despliegan encanto palatal a raudales, tanto en sus clásicas más icónicas como la French Kiss (hamburguesa de proteína de guisantes, foie vegano casero, mayonesa de trufa, canónigos, manzana y cebolla caramelizadas) o la Blind Date (hamburguesa de proteína de guisantes, pepinillos, tomate, lechuga, cebolla roja, cebolla caramelizada, queso cheddar vegano y salsa burger casera) así como en entrantes sabrosos y apetitosos: imperdibles las alitas de coliflor con mayonesa ahumada, la berenjena asada (y marinada en tamari y ágave, con base de hummus de coliflor, dukkah, eneldo, granada, zumaque y salsa de tahini con limón) o el suculento Bibimpap, un bowl de tofu a la parrilla marinado en salsa tamari con arroz basmati, salsa satay, rúcula, canónigos, kimchi, wakame y semillas de sésamo.
Apartado líquido
Destacan los cócteles, con 9 propuestas disruptivas veganas que pivotan entre los clásicos (como la Michelada o el Spritz) y los signature, con opción a adaptar la propuesta a las preferencias de la clientela. Para acompañar este despliegue mixológico, se proponen 6 referencias de vino blanco, tinto y cava, todas ellas disponibles en botella y a copas.
En el apartado no alcohólico, la kombucha se elabora en casa, así como el excepcional ginger beer de zanahoria y jengibre frescos, con aderezo de lima y azúcar.
El café, por supuesto, es de especialidad, de la tostaduría barcelonesa Hidden.