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La Vinitfest, organizada por Adernats en la Catedral del Vino de Nulles (joya modernista de 1917) se consolida en su tercera edición –celebrada el pasado día 8– con más de medio millar de personas y el cartel de entradas agotadas. El festival se posiciona como un claro referente del enoturismo tarraconense mostrando su vertiente más festiva de la cultura vinícola y gastronómica.
La banda Swing-À-pour junto con los bailarines de TGNswing fueron los protagonistas del inicio de una noche mágica. Un juego de luces pintaba de colores la bodega y una voz en off relacionaba los inicios del siglo XX con los tiempos actuales en una performance que caracteriza los inicios de cada Vinitfest. En un patio adjunto a la bodega la formación musical La Colonia animaba al publico a bailar con sus ritmos mediterráneos en un escenario entre la monumental pared de piedra de la bodega y las tinas de inoxidable que reflejaban las luces de las guirnaldas que iluminaban el espacio. En la otra parte de la bodega, un café de época era el espacio donde actuaba el pianista Ruben Villarroya y el artista Adrià Batet que pintó un cuadro para la ocasión a pocos metros de la barra donde se podía degustar el Mojito Seducció, que fue una de las sensaciones de la noche. La unión entre un coctel tropical y un vino con carácter mediterráneo (Adernats Seducció) fue el maridaje perfecto en una noche de agosto, la de la Vinitfest.
En la entrada de la bodega, una sorprendente performance de la ilustradora Jessica Llagostera transformaba el pasillo de la bodega en una calle de pueblo de fiesta mayor. Después de pasar por dos estands con tapas y copas se llegaba a la parte superior, donde los espectaculares arcos de ladrillo de la Bodega Modernista actuaban de escenario de un grupo de artistas de disciplinas muy diversas; Ilustradores de la revista Licor del Mono, artistas visuales con diversas performance adaptadas al espacio, incluso la escritora Montse Farrés compuso un poema para esa noche.
El público pudo disfrutar de hasta 6 maridajes más una copa de bienvenida a la entrada. Adernats Seducció, Adernats Rosat, cava Reserva Brut Nature, o Adernats Instint son algunos de los vinos y cavas que se pudieron degustar. A nivel gastronómico la variedad de tapas iba desde una sepia con albóndigas del chef Àngel Soler, una degustación de galletas del maestro artesano pastelero de Ca Les Taronges, Roger Vallvè, hasta un macaró de foie por parte de Joan castell del Restaurante Portal 22 pasando por una paella del jefe de cocina de la Cooperativa de Arrossaires del Delta.
La fiesta finalizó avanzada la madrugada con la actuación que cerró el acto a cargo de los Swing-A-pour, en un escenario ubicado en la fachada de la bodega donde los asistentes pudieron degustar las últimas copas de vinos o Mojito Seducció.
Desde al organización se hace una valoración muy positiva tanto del transcurso del acto como del eco que está teniendo en la zona. “Tenemos público de todo el centro y sur de Cataluña además de turistas de diversas nacionalidades, aun sin grandes inversiones publicitarias cada año se agotan las entradas antes gracias al “boca oreja y al buen feed-back con los asistentes”, afirma Adam Albert, coorganizador de la Vinitfest junto con Francesc Boronat y la dirección de la Vinícola de Nulles.
