La llegada del otoño es un momento marcado en el calendario de los amantes del vino. Es el tiempo de recoger las uvas y empezar el proceso que meses más tarde se convertirá en vino. Es en este momento cuando Coravin, sistema que permite extraer el vino de la botella sin descorchar el tapón, se erige como el instrumento ideal para catar los nuevos vinos que llegan al mercado tras un largo proceso de maduración.
Y es que Coravin permite consumir el vino a copas y en intervalos de tiempo tan largos como el usuario prefiera. Esto permite que el amante del vino puede complementar diferentes catas de diferentes botellas y en distintos periodos sin que el vino modifique su sabor.
El sistema Coravin abre una nueva era en el consumo del vino para diferentes sectores en España y en el resto del mundo: particulares, que pueden realizar catas, solos o en grupos, de diferentes vino al mismo tiempo sin que estos modifiquen su sabor; restaurantes, que pueden ofrecer sus referencias a clientes a copas sin tener que deshacerse de aquellas botellas que no han sido consumidas de su totalidad. Y bodegas y tiendas, que pueden ofrecer una copa de vino a sus potenciales clientes para ayudarles a decidir sobre su compra.
Esto es posible gracias a la tecnología única de Coravin y a su funcionamiento único y muy sencillo: el sistema de acceso inserta una aguja de acero inoxidable recubierta de teflón de un diámetro muy reducido a través del corcho. Una vez dentro, el sistema Coravin inserta un gas noble –argón– en su interior, presurizando el vino. Esto permite, por un lado, servir el vino de la botella y por el otro, al no descorchar la botella, que el vino siga evolucionando como si nunca hubiera sido abierto.