Los responsables de la Denominación de Origen Montsant trabajan intensamente estos días en el denominado ‘día después’.
El futuro de bodegas y viticultores, una vez pasada esta crisis sanitaria, es una incógnita, y por eso desde la D.O. Montsant se busca minimizar lo máximo posible la incertidumbre con medidas e iniciativas que apoyen a sus miembros.
En este sentido, la D.O. Montsant es parte activa, a través de la comisión de agroalimentación, de las reuniones que la Cámara de Comercio de Reus está organizando periódicamente para identificar las necesidades del sector e intentar paliar los efectos del día siguiente de la Covid-19.
Entre las medidas que hay sobre la mesa, está el incidir en el consumo de productos de proximidad, especialmente en cuanto al canal HORECA, con un peso muy importante en la zona.
También a nivel comarcal se están poniendo todos los esfuerzos para combatir la situación. Así, los sectores socioeconómicos del Priorat se reúnen también estos días para estudiar la implementación de herramientas que se puedan poner en marcha en la comarca de cara al futuro más próximo y que sirven para salvaguardar los principales ejes económicos del territorio, como son el sector del vino y el enoturismo en su sentido más amplio.
Asimismo, desde la D.O. Montsant se continúa trabajando intensamente en un modelo de producción vitivinícola sostenible, con el firme convencimiento de que este es el camino para conservar un entorno natural único y reducir el impacto ambiental en la cantidad y la calidad del vino producido en la comarca,