VINO

Pagos del Moncayo, ejemplo de sostenibilidad

bodega-pagos-del-moncayo-eco-prowine-boxesLa Bodega Pagos del Moncayo ha sido elegida como ejemplo de sostenibilidad por el proyecto europeo de Eco-Prowine en el que participa como bodega piloto desde 2014 y cuyo objetivo es el de implantar la metodología de análisis de ciclo de vida, así como soluciones sostenibles en la producción de vino. Como parte de la acción divulgativa del proyecto, Bodega Pagos del Moncayo participará en la mesa redonda del seminario Eco-Prowine que tendrá lugar mañana viernes día 27 de febrero en la Feria de Zaragoza con motivo de la celebración de Enomaq 2015.

La bodega planteó desde sus inicios una forma de producción artesanal –evitando los procesos innecesarios y optimizando sus métodos de elaboración– en lugar de un modelo industrializado, dando un paso adelante hacia una desaceleración controlada de su sistema de producción.

A través de la implementación de un modelo de producción más tradicional y artesano, la bodega conseguió reducir el impacto medioambiental de la producción de los vinos de PdM Moncayo. Algunos aspectos clave de este proceso de elaboración fueron considerados como un modelo de referencia en bodegas productoras de menos de 100.000 botellas al año, de acuerdo con el proyecto europeo de Eco-Prowine:

– La bodega no tiene conexión a la red eléctrica principal. Utiliza paneles fotovoltaicos y un generador diesel que se conecta ocasionalmente.
– No se utilizan sistemas de climatización artificiales, ya que la ubicación estratégica de la bodega al pie de la Sierra del Moncayo le permite regular la temperatura de la bodega de manera natural.
– La elaboración del vino en lagares abiertos brinda la posibilidad de:
– Realizar el remontado manualmente a través del uso de pies y manos, sin necesidad de emplear sistemas eléctricos.
– Cupaje de vinos directamente en los lagares saltando pasos innecesarios que requieren el bombeo del vino.
– El almacenamiento de los vinos en tanques de polietileno, al igual que las barricas de roble, permiten la micro-oxigenación de los vinos potenciando la calidad de los vinos jóvenes ahorrando recursos y evitando el uso masivo de barricas, cuya vida se limita a los 5 años.

Estos son algunos de los puntos más destacados del sistema de producción.

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