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La bodega Finca de la Rica presenta la nueva imagen de su vino El Guía. Se trata de un vino elaborado con la variedad tempranillo más un pequeño aporte de viuras centenarias procedentes de la zona más fresca del corazón de la Rioja Alavesa, Labastida. Se elabora con el típico despalillado, engrandecido si cabe con un pequeño toque de maceración carbónica, y se vinifica en tinas de acero inoxidable de 20.000 litros de capacidad. Se cargan los depósitos por la parte inferior, evitando que la fruta se golpee y con ello el sufrimiento de la misma.
El resultado es unn vino de color cereza poco madura con bordes azulados que delatan su juventud. Madurará su color con la crianza en botella. En nariz esta cosecha es mucho más frutal que floral. Desde su descorche podemos apreciar aromas lácticos y frutales. Frutas rojas, fresas y frambuesas poco maduras se entremezclan con aromas de flores rosas y violetas. En boca se presenta agradable y cremoso. De carnosidad media es un vino amable, divertido, y sobre todo rico y sincero. Es el compañero ideal de la cocina tradicional, marida extraordinariamente bien con legumbres. Además, es ideal para los aperitivos, los almuerzos informales, para alternar, para iniciarse en el consumo de los tintos, para el campo, para la playa, etc. Un todo terreno si tenemos siempre especial cuidado con las temperaturas de consumo, entre los 10º y 12º. 
Además, la bodega Finca de la Rica ha puesto en manos del Estudio Icono Gráfico de Logroño el restyling de sus vinos El Buscador y El Nómada. La cosecha 2012 de este último ha nacido avalada por una puntuación de 92 puntos en la nueva Guía Peñín 2016 que próximamente se presentará en Madrid. Puntuación fantástica y poco habitual en vinos de un segmento de precio tan accesible. Y es que los vinos de Finca de la Rica triunfan entre expertos y consumidores. Una bodega que pese a su corta vida está presente en más de 20 países siendo su mercado más importante el canadiense.
Más información: www.fincadelarica.com
