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Las cepas más antiguas de Bodegas Martín Códax hacen brotar las uvas que dan nombre al albariño Finca Xieles. Orientadas hacia el mar, se yerguen en un terreno de marcada pendiente, dividida por muros de piedra, conocidos en gallego como “socalcos”. Los viñedos de esta parcela, que mide cerca de una hectárea, fueron plantados a finales del siglo XIX y conforman uno de los terrenos cosecheros tradicionales más antiguos y más importante de Cambados.
Miguel Tubío el director técnico de la bodega, explica que la singularidad de esta plantación es que mantiene cepas prefiloxéricas. Un vino de una única finca, cuidadosamente plantada y seleccionada a mano de forma tradicional, por los antepasados.
Todas estas características y este largo recorrido en el tiempo aportan a este albariño gran intensidad, largura y amplitud. Desde 2006 en Bodegas Martín Códax trabajan en la clasificación de zonas, con el apoyo de las nuevas tecnologías, para seleccionar diferentes terruños y uvas procedentes exclusivamente de parcelas seleccionadas. Finca Xieles se elabora en su totalidad con uva albariño, procedente exclusivamente de una única parcela. Este vino tiene una crianza de seis meses en depósitos de hormigón de 1.700 litros.
Este vino es limpio y cristalino de color amarillo pajizo. En nariz de intensidad media con notas cítricas, tipo pomelo, y de fruta blanca, tipo manzana y pera. Notas florales, de gardenia y jacinto. Y con un fondo balsámico y de hierbas aromáticas, como el romero. En boca es intenso, largo y cítrico. Boca amplia, buena acidez. Gran volumen. Con retronasal balsámico.
