Hace unos días, Belondrade reunió en su finca Quinta San Diego a un selecto grupo de amigos, bodegueros, colaboradores y clientes de numerosos rincones del mundo para celebrar el XXV aniversario de la bodega. Este XXV aniversario coincide, además, con otro hito importante, los 20 años de Marta Baquerizo en Belondrade.
Un encuentro tan emotivo para la familia y tan especial que contó con seis de los mejores cocineros de Castilla León, todos ellos distinguidos con una estrella Michelin, para ofrecer a sus invitados sabores y armonías inolvidables, reunidos en la tierra que cada día pisan, sienten y admiran.
Víctor Martín (Trigo, Valladolid), Juanjo Pérez y Yolanda León (Cocinandos, León), Víctor Gutiérrez (Restaurante Víctor Gutiérrez, Salamanca), Yolanda Rojo y Juanjo Losada (Restaurante Pablo, León), Miguel Ángel de la Cruz (La Botica, Matapozuelos) y Pedro Mario y Óscar Manuel Pérez (El Ermitaño, Benavente) crearon un menú basado en productos de la región, para disfrutar al máximo de las emblemáticas añadas antiguas de Belondrade y Lurton, que se sirvieron en formato imperial (6L).
Las celebraciones habían empezado medio año antes, cuando Belondrade reunió a un escogido grupo de sumilleres de algunos de los grandes restaurantes de España alrededor de la misma vertical de Belondrade y Lurton. Ellos serían los encargados de seleccionar el modelo de copa más adecuado para cada uno de los seis vinos que se sirvieron en el almuerzo.
Didier Belondrade comenzó su andadura en el mundo del vino en el año 1994, tras intuir en la variedad verdejo un particular potencial de envejecimiento desconocido hasta la fecha. Fue en La Seca (Valladolid), cuna de esta variedad, donde se instaló en el año 2000. La construcción de la bodega y la adquisición de varias parcelas de esta variedad blanca materializaron su ilusión, crear un vin de château.
Veinticinco años después, Belondrade se fundamenta en el viñedo, trabaja con certificado ecológico desde 2010 en un total de 22 parcelas y cuenta con un equipo humano que ha crecido, sin perder el espíritu de una familia. Jean Belondrade encarna la nueva generación que continua los pasos de su fundador, expresando en sus vinos su propia interpretación del clima, del terruño y de la verdejo.