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Así podríamos definir la nueva propuesta del equipo de Timesburg que ha abierto su puertas en el muy gastronómico Passeig de Sant Joan de Barcelona. Se llama Chickster, por lo que deducimos que su nombre es un guiño al pollo pero con aires ‘hipster’, es decir, moderno e informal. Lo del Empordà es porque la materia prima base de la mayoría de platos es el pollo ecológico de esta región de la costa gerundense.
Y es que estamos ante un ‘fast good’, ese término que inventó hace años el gran Ferran Adrià que consiste en comida rápida pero de calidad. Así que aquí el pollo es ‘top’ y lo podemos encontrar a la parrilla, crunchy, en ensalada, en burger… y acompañado de los más diversos y deliciosos sides, lo que comúnmente se llaman ‘acompañamientos’, pero es que aquí, no lo olvidemos, son ‘hipsters’. Así, encontramos champiñones Portobello al hummus, palitos de mozzarella, verduras al horno con pesto y, cómo no, las irresistibles patatas Timesburg, que tienen ya toda una legión de fans en la ciudad.
En un entorno cálido y divertido, similar al de sus hermano mayor Timesburg, Chickster tiene muy claro su objetivo: pretende volver a poner en el mapa gastronómico un producto tan popular como versátil y delicioso: el pollo.
