Extraordinario el trabajo que la Fundación ALImentació i ciènCIA, Alicia, viene realizando en los últimos años para desarrollar herramientas nutricionales y recetas culinarias destinadas a mejorar y hacer más placentera la dieta de los enfermos de cáncer que, como consecuencia de los agresivos tratamientos que reciben, tienen graves problemas para alimentarse correctamente y con garantías de mejorar sus dolencias. Sorprendente y muy didáctica su exposición y demostración práctica en el III Congreso de Gastronomía y Salud, celebrado en Zaragoza los días 8 y 9 de noviembre, donde el director de la Fundación, Toni Massanés y la nutricionista Fabiola Juárez Muriel, presentaron las líneas generales del proyecto en el que están embarcados, mientras que el chef Marc Puig-Pey, responsable de cocina del departamento de Salud y Hábitos Alimentarios de La Fundación, elaboraba recetas para solucionar los distintos problemas a los que deben hacer frente estos enfermos, tales como sequedad de boca, percepción de sabores metálicos al ingerir proteínas animales, etc.
Sensaciones de casi incredulidad y cierto estupor ante personajes de tan grandísima talla que en su momento pusieron sus extraordinarias cualidades y capacidades al servicio de los avances en cocina molecular y tecnoemocional, que en buen medida permitieron situar a Ferran Adrià en el escaparte mediático internacional, y desde hace un tiempo han bajado de tan rutilantes universos a una tierra doliente donde pacientes oncológicos libran su cotidiana batalla, para proporcionarles una mejor calidad de vida y nutrirles de esperanza. Texto: Miguel Ángel Almodóvar